Review | Alcatel Serie 5: Un buen teléfono, un año más tarde

alcatel

El teléfono insigne de la compañía francesa tiene varias decisiones interesantes en cuanto a diseño, pero su corazón sigue viviendo en el pasado.


En un mundo donde la experiencia y la apariencia de los celulares es cada vez más homogénea, un poco de diferencia suele siempre agradecerse. Y eso es lo que a primera vista llama la atención del Alcatel Serie 5, el nuevo teléfono insignia de la marca francesa, presentado este año en la MWC y que estará llegando a Chile dentro de las próximas semanas.

El teléfono no tiene ninguno de los pecados capitales de la telefonía moderna: no tiene la chasquilla, no es un bloque negro uniforme ni tampoco se siente como un juguete. De cerca y de lejos se ve como algo diferente. Si es bueno o malo dependerá de tu gusto, pero si hay algo de lo que no puede acusarse a este teléfono es aspirar a ser como esas marcas que viven de la copia entre ellas.

De frente, nos encontramos con una pantalla de esas "sin bordes", tan bonitas como siempre por lo menos hacia los costados. Sufre de un exceso de bordes, siento, en la parte superior e inferior, pero logra mantener el formato 18:9 de manera agradable.

Por detrás, también es algo diferente, con un diseño que usa los círculos del lector de huellas y de la cámara para generar una apariencia simpática, y como dije, diferente.

A mi, en lo personal, me agradó bastante, me gusta premiar la diferencia.

Pero todo mi cariño por la experiencia con el teléfono comenzó a degradarse cuando lo encendí.

El Alcatel Serie 5 es un equipo del año... pero del año pasado. Se nota, por ejemplo, al ver que no viene con Oreo, sino con Android 7.1. Uno podrá argumentar si realmente hay diferencias entre ambos sistemas, pero a a larga se nota en cosas como la rapidez al comenzar, el uso de la batería, algunas funciones extras y demases. Oreo debería ser el sistema por defecto, ya que hay hasta gamas media que lo traen.

Tampoco ayuda que su procesador, el MTK 6750 tampoco sea del año. Es como cuando uno viaja en un bus nuevo por fuera, pero con asientos y cinturones reciclados.

Lo más curioso de todo es la capa de personalización que trae Alcatel, que por último podría justificar el uso de ese tipo de recursos, pero nada ayuda. Lo más llamativo es esta especie de botón auxiliar que permite acceder a diferentes funciones del teléfono como la calculadora, la linterna, el copiar y el pegar documentos y otros en una ruedita que siempre está disponible. La novedad dura muy poco y al rato ya quieres que se vaya. No es un equipo que venga con cosas muy pesadas por defecto, pero las que vienen no aportan mucho. Un Android algo más puro  (y actaulizados) se hubiese agradecido.

En cuánto a las cámaras, el desempeño de estas es algo normal, que cumple, aunque funciona mucho mejor en condiciones de luz que de oscuridad. La aplicación es rápida y sin muchas opciones que mareen al consumidor, es un apunta y dispara clásico.

No hay ningún tipo de posproducción a las imágenes como en los teléfonos gama alta, y a pesar de tener un solo lente en la cámara trasera, logra buenos enfoques y desenfoques. Los colores, eso sí, son algo opacos, pero repito, tiene que ver con la luz. Esta es la prueba de los amiibos.

Y la prueba sin luz, nada que destaque mucho, salvo que lo que si logra verse se ve bien y sin movimiento, lo que habla bien de la rapidez de la cámara.

La frontal viene con dos lentes, y es sin duda donde mejor está puesto el foco. En ese sentido, el Alcatel Serie 5 se perfile como un teléfono de uso para redes sociales, aunque no se como vaya a comportarse en un mundo donde las apps de redes se actualizan tanto y con tanta frecuencia.

En cuanto a la batería, es un equipo de 3.000 mAh, el estándar de la gama media, aunque tiene la ventaja de que, al no tener una pantalla Full HD, el gasto no es tanto. Eso sí, a pesar de tener puerto de carga USB-C, esta no es de las más rápidas del mercado, son casi 2 horas para pasar de 0 a 100.

En resumen, el Alcatel Serie 5 es un teléfono de muy buenas intenciones, pero de poca ejecución y un extraño potencial. A un buen precio podría competir como un gama media que tiene la ventaja de verse bonito, además de ser barato, pero quienes quieran ir por sustancia por sobre estética, hay opciones que le ganan por el simple hecho de tener componentes hechos para el futuro y no para cumplir.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.