Kylo Ren no era el único aprendiz de Snoke

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Un material que acompaña la promoción de la película entrega una llamativa descripción sobre el Líder Supremo de la Primera Orden.


Spoilers a continuación.

Una revista relacionada a la promoción de Star Wars: The Last Jedi fomenta la especulación sobre lo que sucede tras bambalinas en la Primera Orden, poniendo en el tapete nuevamente todo aquello que no hemos visto y reavivando los misterios sobre una pregunta sin respuesta hasta ahora: ¿Qué pasó con los Caballeros de Ren?

En ComicBook.com apuntan a que la revista tiene una particular descripción del Líder Supremo. Según la publicación, "sensible a la Fuerza, y muy en sintonía con el lado oscuro sin ser un sith, Snoke ha entrenado a Kylo Ren y al menos a otro aprendiz".

Durante los sucesos del Episodio VIII, solo existe una pequeña pista sobre los Caballeros de Ren. Durante un diálogo entre Luke y Rey, el maestro Jedi revela que Ben Solo, junto a un grupo de sus aprendices, destruyeron el nuevo Templo Jedi y al resto de sus padawans". No existen más detalles, pero esa sola línea de diálogo da entender que los caballeros de Ren son los ex aprendices de Luke que también cayeron en el lado oscuro.

Sin embargo, durante la película no hay nada más al respecto y esta nueva información da luces de que en el Episodio IX finalmente podríamos ver algo más del legado de Snoke, que corrompió a la nueva Orden Jedi y tomó liderazgo de la Primera Orden, solo para servir como un trampolín para la figura de Kylo Ren como líder absoluto durante los sucesos de The Last Jedi.

Todo está en el campo de la especulación, pero durante toda esta trilogía nos han tanteado la existencia de esos caballeros de Ren y no nos han dado más concreto. ¿Será que Snoke tenía un plan de contingencia o entre los alumnos de Luke también había otro poderoso aprendiz que llamó la atención del Líder Supremo?

Claro, todas esas dudas seguirán sin respuesta por un par de años más. O, siguiendo la tónica del Episodio VIII, quizás no las respondan directamente en las películas. Siempre habrá espacio para novelas, cómics o videojuegos que completen la trama. Star Wars, mal que mal, es un imperio multimedial.

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