La inolvidable Noche Alba de 1997

La olla estuvo bastante pelada ayer en la Noche Alba 2017. En el partido amistoso ante Lanús, Colo Colo presentó a sus ya conocidas contrataciones para la temporada: Mark González y Pedro Morales. Muy lejos de la emoción de anteriores ediciones, en donde el público llegaba en masa al Monumental sólo para descubrir al "tapado".

Esto último era lo que acontecía dos décadas atrás. En 1997, y después de obtener el título nacional y la Copa Chile el año anterior, los albos armaron un equipo que sería recordado por llegar a las semifinales de la Copa Libertadores de ese año.

Los presentados en la Noche Alba 1997 fueron: Ismael Ahumada, Miguel Latín (ex Deportes Temuco), el argentino Nicolás Lauría Calvo, Raúl Muñoz (posteriormente sería el "10" de la Selección Chilena...), Manuel Neira, el brasileño Paulao, Francisco Rojas (retornó desde Tenerife), Luka Tudor, Carlos Vega, Marco Villaseca, José Yates (venía de Rangers, elenco al que derrotaron en la final de la Copa Chile anterior) y Richard Zambrano.

Pese al poco cartel de la mayoría de estas incorporaciones, la mayoría de ellos tuvo la oportunidad de jugar la Libertadores y ser parte de la campaña que los puso entre los cuatro mejores. Claro, porque en la fase grupal, a los dirigidos por Gustavo Benítez les tocó compartir grupo con los venezolanos Mineros de Guayana y Minervén. En aquel tiempo, hasta los equipos bolivianos goleaban de visita a sus similares "llaneros".

Aún así, dentro del listado sobresalieron dos por su sonoro fracaso: el brasileño Paulao y Nicolás Lauría Calvo.

El primero, defensa central, llegó con "cartel" gracias a sus pasos en clubes como Cruzeiro, Gremio, Vasco da Gama y Atlético Mineiro, y Benfica y por haber estado en la selección de Brasil. Sin embargo, arribó lesionado y apenas disputó un partido.

Lauría Calvo, atacante, provino desde Colón de Santa Fe y terminó su carrera en el fútbol profesional apenas tres años después, en Juventud Antoniana de Salta.